Aunque el Citroën c4 Cactus es un producto español, fabricado en la madrileña planta de la firma en Villaverde (Madrid), el entorno de Marsella ha sido el elegido para la primera toma del contacto con el modelo, que ya está disponible en los concesionarios españoles. Estéticamente esta segunda generación, que se sigue montando sobre la plataforma del C3, sufre un cambio bastante radical, aunque conserva el estilo del modelo actual. Desaparecen los “airbump” que ahora tan solo ocupan una mínima superficie de la parte inferior de las puertas, así como las barras del techo. Pero sigue recordando al “Cactus” que todos conocemos y que todavía podemos encontrar, con una promoción muy interesante, en los concesionarios de Citroën.