Las matriculaciones de automóviles con motorización diésel en régimen de renting descendieron un 21,3% en marzo pasado tras contabilizar 15.454 unidades, según datos obtenidos por Fleet People a través de la consultora de referencia de automoción MSI Iberia.
Esta caída contrasta con el incremento experimentado en el mismo mes por las ventas de coches en renting con propulsor de gasolina, que se incrementaron en un 75,3% con 10.046 unidades comercializadas.
Los mensajes externos que están demonizando la utilización de los motores diésel están impactando con fuerza en su demanda y obligando a las marcas de automóviles a ofrecer con más ahínco propuestas de gasolina, ante un futuro a corto y medio plazo marcado por la incertidumbre en el espectro político, y especialmente en la Unión Europea, en relación directa con todo lo tocante a emisiones, consumos y sistemas de propulsión.