En un segmento tan competido como el de los turismos compactos (C), donde el rey indiscutible del mercado en España es el Seat León, seguido a cierta distancia por el Volkswagen Golf, el Renault Mégane y el Peugeot 308, la única posibilidad de crecimiento que tienen sus competidores es a través de la innovación. Y eso es lo que ha hecho siempre Toyota con el Auris, que es el híbrido más vendido en España y también es de los más veteranos.